Nuestra Cofradía de la Santa Vera Cruz de Rute, asistio los días 27 al 28 de Septiembre, al IV Congreso Mundial de Hermandades de la Vera Cruz y a la XXV Peregrinación Nacional de Hermandades de la Vera Cruz, celebrado en este año de 2008, en Zamora.
Los actos, tanto del día 27 como el 28, estuvieron, presididos por el Santo Lignum Crucis, que se venera en el Monasterio de Santo Toribio de Liebana (Potes, Cantabria).
El Santo Lignum Crucis, bajo palio, lo portaba, el Señor Obispo de Santander, Monseñor Vicente Jiménez Zamora, y a las puertas de la Iglesia de San Ildefonso, aguardaba para recibirlo,el Obispo de la Sede Episcopal de Zamora, Monseñor Gregorio Martínez Sacristán.
En la noche, del 27 de Septiembre, uno de los actos que se celebraron, en la Iglesia Catedral, fue un concierto de música sacra, a cargo de la Agrupacion "Alollano", bajo Dirección de D. Miguel Manzano. Esta misma noche, se celebró el rezo del Via-Crucis, por las calles anexas a la Santa Iglesia Catedral de Zamora.
En la mañana del día siguiente -Domingo 28 de Septiembre- comenzaban los actos de la XXV Peregrinacion Nacional de Vera Cruz, con una recepción de las Cofradías asistentes, localizadas de toda la geografía española
A continuación, comenzaria la procesión, hacia la Catedral, con el paso de la Santa Vera Cruz, de la Cofradía de Zamora.
Tras el paso, como siempre y por orden alfabético, acompañando con estandartes y baculos las Cofradías (salvo la nuestra, que llevaba velas verdes), tras las cofradías y bajo palio el Santo Lignum Crucis, cerrando la comitiva, autoridades etc....
Tras la procesión, se llego a la Catedral, y tras poner el Santo Madero, presidiendo el Altar Mayor, dió comienzo la Solemne Eucaristia, presidida por el Obispo de Zamora.
De entre las cofradías asistentes se pueden contemplar, Bilbao, Gijón, Salamanca o Plasencia, de la parte norte peninsular entre otras, y del sur de España, Alcala del Rio, Brenes, Sevilla, Villanueva del Ariscal,Villaverde del Rio y por supuesto la nuestra, entre otras muchas.
Al termino de la Santa Misa, las cofradías asistentes se desplazaron hasta el convento de Santa Marina, para realizar, como viene siendo tradicional, la ofrenda floral, a los pies de la Virgen, titular de la Cofradía anfitriona.